Velocidad


Hoy mientras iba en el tren, con el vagón en silencio, miraba por la ventana y le daba vueltas a esta primavera tan rara que estamos viviendo. 

Como si fuera un electroplasma, y lo que viera a través del cristal del cercanías fuera un mundo ajeno al mío, inicié un análisis global. 

Se trataba de una ciudad iluminada, pero cubierta de unas nubes que indicaban tormenta. Los edificios se perfilaban fríos y algo llamativos y los ciudadanos quedaban escondidos en el horizonte del skyline. 
Por la luz, parecía que estaba atardeciendo, pero el reloj aún no había marcado las tres.

Como si al estudiarlo, pudiera no sentirme cuestionada, lancé una pregunta a Madrid, que como si de una persona se tratase, me contestó al segundo devolviéndome la mirada y respondiéndome con sus ojos, o quizás con los míos. 

Ante mi "¿qué le está pasando a esta primavera?", ella me  respondió "velocidad".

Mientras lo escuchaba,  no paraba de darle vueltas, preguntándome si realmente lo que ha cambiado en esta primavera no ha sido ni el tiempo ni el espacio, sino la velocidad con que ha pasado, es decir, con la relación entre ambos conceptos. 

Quizás, sin habernos dado cuenta, se nos ha escapado, y ya estemos en otoño; y en un abrir y cerrar de ojos se "nos ha ido" la primavera; y las hojas van a caer, aún, sin haber nacido.

Fue una conversación corta y en silencio, lo suficiente como para no enturbiar los pensamientos del resto de pasajeros pero sí los míos.
Madrid, como eres.
Cualquiera pensaría que lo tenías programado.



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Esta entrada forma parte de una iniciativa llamada "Ectoplasmas" creada por la culpa del alcohol y algunos chupitos que aún están por beber.

Estos fueron otros resultados por orden cronólogo, no tiene desperdicio.

- Pintores de..... : http://pintoresde.blogspot.com.es/


7 comentarios:

  1. Me encanta.. todo.. ya sabes... y madrid.. lo tiene todo previsto...

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  2. Madrid es una ciudad difícil para la primavera. Puede que sea la velocidad, la prisa, o que en el tren no caben las flores.

    Cuídate.

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  3. Madrid es una ciudad a la que es muy fácil asociar la palabra velocidad. Hay veces que todo va demasiado rápido y parece que sólo podemos ver las cosas que hemos dejado atrás.

    Un abrazo!

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  4. Madrid y sus peculiaridades. Quizá esa palabra, velocidad, es la que mejor defina a esta ciudad. Aunque en medio de esa prisa madrileña, siempre hay segundos de paz que son regalos tanto o más peculiares que la propia ciudad.

    Un beso furte!

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  5. A 600 Km. de Madrid, puedo atestiguar que esta extraña primavera que padecemos es digna de ectoplasmas saltando de vagón en vagón.

    Un saludo

    http://misrelatosyesteblog.blogspot.com.es/

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  6. Madrid, tan centrica que se aísla y nos aísla a nosotros mismos de cuando en cuando, confusa y caótica a veces. Pero aun así... veloz y enérgica, tan llena de vida y sinceridad en sus adoquines desgastados... Lo confieso, la amo y la odio a partes iguales, no lo puedo evitar :)
    Buen post.

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  7. Con todo lo que estoy viviendo este año casi casi diría que efectivamente la velocidad está siendo una constante. Se me están pasando los meses que no sé ni siquiera si los he llegado a vivir del todo.

    Madrid y sus bromitas. Aunque a veces te hagan partirte de la risa.

    Abrazos.

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